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Lo bueno de la homeopatia

La homeopatía primeramente trata siempre a la causa de la enfermedad, y no a las manifestaciones de la misma en el organismo, al hacer esto, realmente la meta de curar, puede ser alcanzada plenamente.

Además, no tiene la más mínima capacidad de dañar al organismo sujeto al tratamiento. Frecuentemente puede suplir a los antibióticos comunes en caso de infecciones bacterianas o micóticas, en las infecciones de tipo viral, es el único tratamiento que de manera clara mejora las condiciones del sistema inmunológico, de tal manera que el propio organismo es más eficaz en el combate y destrucción del virus invasor. En un buen número de ocasiones evita la necesidad de procedimientos quirúrgicos no urgentes como la adenoidectomía, amigdalectomía, remoción de quistes tanto mamarios como ováricos etcétera.

Es de gran ayuda también en el campo de la fertilidad, sin tener la más mínima posibilidad de provocar embarazos múltiples.

Es también un excelente tratamiento en las enfermedades alérgicas y desde luego en todas aquellas que guardan un componente psicosomático (refiérase a la sección de Salud Mental para mayor información).
No hay realmente ningún tratamiento que se le asemeje en estas cualidades.