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Artrosis - Osteoartritis

Reumatología

Los síntomas más frecuentes son dolor articular a la presión directa o con el movimiento, limitación del movimiento, crepitación , derrame de líquido sinovial (poco frecuente) y grados variables de inflamación.

Generalmente el dolor es la única molestia, pero puede haber rigidez articular, aumento de volumen de consistencia dura y deformación articular. A medida que avanza la patología, puede haber dolor incluso en reposo, el cual de manera característica mejora con el ejercicio.

La OA se clasifica de acuerdo a su probable factor desencadenante, ya que no se puede hablar de causa ya que es de origen multifactorial. Si la o las articulaciones eran previamente sanas hasta el inicio de la enfermedad, se clasifica como primaria , ésta es la forma más común y los sitios de mas frecuente afección son:

formato articulos clip image003Articulaciones interfalángicas distales (Nódulos de Heberden 70%)

Primera articulación metacarpo-falángica (base del dedo pulgar) Interfalángica proximal (Nódulos de Bouchard 30%)

Articulaciones de las rodillas

Si ya existe daño articular previo por otra patología diferente, como el producido por un traumatismo, gota, artritis reumatoide, será clasificada como secundaria .

Su diagnóstico es clínico o sea que se identifica gracias a la información que es proporcionada por el paciente y cuestionada por el médico. Como apoyo están las radiografías que entre otros datos indicarán si existe una disminución del espacio interarticular o la presencia de osteofitos , los cuales de acuerdo a su grado, darán un valor pronóstico al padecimiento.

La clave en su tratamiento , debe de ser el conservar la integridad del cartílago articular para lo cual se requiere tener un balance adecuado entre la síntesis y la degradación de la matriz cartilaginosa extracelular. Realmente no hay hasta la fecha un tratamiento que sea óptimo, ya que el convencional u alópata se basa en la disminución del dolor lo cual trae muchos problemas de tolerancia ya que los medicamentos analgésicos anti-inflamatorios dañan a la mucosa gástrica al ser administrados por tiempo prolongado. Los medicamentos homeopáticos ofrecen en general una buena alternativa de tratamiento no únicamente para los casos de intolerancia al mismo, sino también como alternativa, dejando la ingesta de éstos anti-inflamatorios de manera ocasional. Lo más importante del tratamiento no es médico sino mas bien educativo.

En la medida que el paciente entienda la importancia de la pérdida de peso, del ejercicio (no de impacto como la natación y los aqua-aerobics etc) de acudir a las sesiones de rehabilitación que le sean necesarias; logrará tener el mejor control de su padecimiento. Pretender ignorar el dolor tolerándolo o atenuándolo solo con analésicos, no es nada aconsejable si lo que usted busca es calidad de vida desde hoy y para el futuro.

Tratamientos con sustancias como el condroitin sulfato y el ácido hialurónico clínicamente parecen tener efectos favorables aunque sus mecanismos de acción siguen siendo poco comprendidos.

RECOMENDACIONES PARA CUIDAR DE SUS ARTICULACIONES

Si bien, nadie tiene control sobre sus genes, hay varias cosas que podemos hacer para proteger a nuestras articulaciones para procurar prevenir problemas como la osteoartritis.

1. Evite el sobrepeso y manténgase dentro de su peso ideal ya que el sobrepeso o la obesidad son factores que predisponen y que definitivamente agravan esta condición.

A mayor peso corporal, mayor estrés al que son sometidas las articulaciones, y para muestra, solo vea la siguiente imagen: blog perdida de peso y articulaciones

 

 

2. Ejercítese ya que la actividad física protege a las articulaciones al fortalecer los músculos que las rodean. Músculos fuertes evitarán que las articulaciones tengan demasiado roce entre sí desgastando al cartílago articular. Es importante que no intente ejercitarse de manera violenta o prolongada únicamente los fines de semana, ya que el beneficio del ejercicio es por la constancia con el mismo más que con la intensidad con la cual se practica. No hay ningún estudio que demuestre que un atleta de alto rendimiento tenga mejor salud que una persona que se ejercita frecuente y moderadamente. Siempre que realice una actividad física nueva, hágalo de manera gradual para evitarse lesiones. Al ejercitarse, use el equipo de protección necesario.

3. Tenga una buena postura. El sentarse derecho quitará presión a las articulaciones del cuello, espalda, cadera y rodillas.

4. Use sus articulaciones más grandes para los movimientos que requieran mayor fortaleza o esfuerzo. Al levantar o cargar objetos, procure que sean las articulaciones grandes (rodillas) las que hagan el esfuerzo y no las pequeñas (vértebras) las que lo hagan.

5. Repose, descanse de manera adecuada. El alternar períodos de gran esfuerzo con adecuados períodos de descanso, disminuirá el desgaste que puede provocar la osteoartritis.

6. Pida ayuda. No vale la pena adquirir una lesión simplemente por no pedir ayuda. Algo de ayuda es en ocasiones la diferencia entre un trabajo bien hecho y uno mal hecho; entre una lesión y entre conservar la salud; entre un accidente y una labor hecha con seguridad.